sábado, 22 de diciembre de 2012

Clásicos animados: Cuento de Navidad (Charles Dickens)

Cuento de Navidad (Cuento navideño de fantasmas)

Marley estaba muerto, dicho sea para empezar. Sobre esto no podía haber duda de ninguna clase. El registro de su defunción fue firmado por el capellán, el escribano, el director de la funeraria y el encargado del cementerio. Scrooge también lo firmó. Y el nombre de Scrooge era digno de crédito en cualquier documento en que se viera estampado.
El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta, como se dice vulgarmente.










No tuvo otros tratos con espíritus, pero desde entonces en adelante, y siempre más, vivió en el principio de la abstinencia total, e incluso se dijo de él, después, que sabía como celebrar la Navidad de la mejor manera, si es que algún hombre posee en vida este conocimiento.
¡Que se pueda decir esto con razón de nosotros, de todos nosotros! Y también, como el pequeño Tim decía, ¡que Dios nos bendiga a todos y cada uno de nosotros!


(Charles Dickens)

PD: Si Dickens hubiese sido algo más cofrade nos hubiese dejado un Cuento de Cuaresma.

2 comentarios:

  1. Hay cosas que se marcan a fuego, como la Semana Santa, una de ellas es este cuento. No soy un gran lector pero, en mi humilde opinión, creo que ésta es una de las historias más bellas que jamás se hayan escrito: compleja y a la vez inocente. Semana Santa en Navidad.

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  2. Por cierto, Dickens también ha escrito sobre procesiones de Semana Santa, lo hace en el libro recién publicado "Estampas de Italia". Las procesiones son italianas, obviously.

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