viernes, 21 de junio de 2013

Vídeos musicales para cofrades: "El Gran Poder" (Sr. Chinarro)


Tres golpes en la madera del violonchelo y... arriba con el tema del Gran Poder.


Esto de meter de por medio al Señor del Gran Poder en los males de amores es cosa que viene de antiguo. Aunque a veces se clamara su ayuda de forma algo más rencorosa, como en este viejo fandango que cantaba el Niño Gloria"Por tus condiciones malas, te tiene que castigá Aquél que está en San Lorenzo, con la túnica morá y la cruz del sufrimiento." 

Y ahora también se le nombra para que eche una mano:
 ♪ ♫... ayer un cristo se apareció en una mancha en tu persiana ¡Ole el misterio!... Lo siento, lo presiento... Ni con el Gran Poder, ni con el Gran Poder, ni estando Él de mi parte me lo dejas ver. Ni con el Gran Poder, ni con el Gran Poder, ni estando Él de mi parte me vas a querer... ♪ ♫ 

Hay que ser muy valiente para meter al Gran Poder en una canción y salir airoso del lance. Esto es algo que debe saber muy bien un sevillano como Antonio Luque, o sea el Sr. Chinarro. 

Y es que el Gran Poder está presente, de algún modo u otro, en todo... en la música actual o en la literatura más actual. Al escuchar lo de esa mancha en la persiana del amor imposible del Sr. Chinarro he recordado esto:


María tiene una carpeta llamada Alma, en ella guarda imágenes pregnantes hechas con palabras. Una de las subcarpetas de Alma se titula "Cosas que al escanearlas se parecen al rostro del Cristo del Gran Poder". Esto puede leerse en la personalísima obra "Alma" del escritor Javier Moreno.


domingo, 16 de junio de 2013

"Del Pesebre a la Cruz" (1912) Sidney Olcott: La Pasión in situ.


Cristo, en el actor Robert Henderson-Bland.
(Su expresión ausente recuerda al Señor del Silencio ante el Desprecio de Herodes de la Cofradía de la Amargura)

El director de cine canadiense Sidney Olcott viajó en 1911 hacia tierras Palestinas para rodar allí un largometraje sobre la Vida y Pasión de Cristo.
Además de rodar in situ, Olcott quiso trasladar la estética de la obra que el pintor francés James Tissot había realizado (igualmente in situ) a finales del siglo XIX.(http://cofrades.pasionensevilla.tv/profiles/blogs/james-tissot-recreo-la-mirada)

Muchas de las escenas de la película de Olcott corresponden exactamente a la obra de Tissot. Fue una especie de colaboración por encima del tiempo y del espacio, la que hubo entre ambos autores, el pintor y el cineasta,  porque Tissot había fallecido en 1902.
En este vídeo colgado en Youtube por el usuario 56Demy se puede comprobar el sabor a Tissot que Olcott le otorgó a su film. Es increíble la recreación casi idéntica que llevó a cabo el equipo de Olcott. (Hacia el 1:18 para los más impacientes. Por cierto, imágenes envueltas en una música preciosa)


En este otro magnífico vídeo del usuario 56Demy se hace referencia al periplo que realizó la compañía de Olcott hasta llegar a Jerusalem. Es muy interesante de ver para saber cómo viajaron y contemplar las fotografías de la compañía de cine, así nos hacemos idea de la época y lugares por los que pasaron.



El resultado fue "From the Manger to the Cross" (Del Pesebre a la Cruz) de 1912.
Aquí la Pasión de Cristo según Sidney Olcott. (Aunque en los vídeos del usuario de youtube silentfilmdemocracy aparece con el título de Jesus de Nazareth y fechada en 1916, se trata de la película de Olcott de 1912)






Sin duda, creo que a Tissot le hubiese gustado ir al cine a ver la película de Olcott.



Texto publicado en Pasión en Sevilla el 15 de Junio de 2012

jueves, 6 de junio de 2013

Vídeos musicales para cofrades: "Immaculate Fools" (Immaculate Fools)


"Aunque le pese a Molina y a sus frailes de Regina...." 
los Immaculate Fools pasan a  formar parte de esta serie. 

Su FE, ESPERANZA Y CARIDAD es para bordarlo en un guión y formar un tramo tras él.


sábado, 1 de junio de 2013

Al hombre del carrito.


Seguro que habéis visto muchas veces ese carrito que marca el fin de la comitiva cuando ya la cofradía se aleja. Si le echáis una ojeada curiosa a su interior, veréis que casi siempre en el carrito hay una escalera (otra stairway to heaven: una escalera sevillana hacia el cielo), o los útiles necesarios para atender cualquier contratiempo, como el plástico para el palio por si llueve, o los cirios, las varas y las cruces que se abandonaron, o los cirios rotos que se cayeron de las manos de los nazarenos... Todas estas cosas puede empujar el hombre del carrito, al que nosotros vemos pasar fielmente tras la cofradía.

Pero el hombre del carrito también nos empuja y nos lleva, de alguna otra forma, a nosotros mismos en su carro. Año tras año, lo hemos visto pasar lentamente (nunca lleva prisa el hombre del carrito) y en el interior de su carrito han ido cayendo los trocitos de nuestra propia vida; y así, como reposan allí los trozos de cirios que se partieron, allí nuestros sueños incumplidos, nuestras renuncias, las cosas que abandonamos o aquello que olvidamos son también parte de su nostálgica carga.

No hay mejor lugar que el que ocupa el hombre del carrito en la cofradía, ni mejor labor. Siempre está contemplando a lo lejos la trasera de un paso que nunca termina de irse y recogiendo con afán lo que se abandona, lo que se olvida, lo que se rompe, para que no se pierda para siempre. 

Al hombre del carrito, cofrade último, que empuja lentamente su carga de utilidad y de renuncia. Hoy me ha pillado a mí con su carrito. No he podido esquivarlo, y mira que venía lento.


Texto publicado en la web cofradespasionensevilla el 30 de Noviembre de 2010